lunes, 21 de julio de 2014

la lógica del borrador

Habimos gente incapaz de terminar la mayoría de nuestras ideas. Vamos a medio camino y aparecen otras, entonces nos desviamos, damos vueltas de carnero, caemos parados o de poto, y empieza un nuevo proyecto, dejando inconcluso el anterior. Quizás (probablemente) es una mala costumbre provocada porque nunca solté el lápiz mina, o si ocupé tinta el cuaderno se llenó de tachaduras, na' de corrector guataesapo. Y acá, en digital, todo es un borrar cortar pegar agregar. 

Nunca terminé mis cómics, nunca los entinté, nunca cerró historia alguna. Mis cuentos para qué decir, los pocos que escribí o que me atreví a escribir ahí quedaron, empolvándose en cuadernos abandonados. Y eso es lo que tiene el blog: sirve para esta interminable fiebre de ideas inconclusas. La soledad del blog, donde apenas tres amigxs leen las ocurrencias de un sujeto que se declara incapaz de crear un producto completo.

Este mismo texto, que era una idea decente según yo, ahora cae y recae. Pensé que tenía algo que decir y quizás ese fue mi error. Uno siempre dice, aunque sea mediante fragmentos. Algo bueno debe tener seguir la lógica del borrador permanente, una cierta libertad. Pero no se vaya a confundir con libertinaje, diría mi abuelita. 


2 comentarios:

fabiancocq dijo...

Es una idea buena y decente, la del texto. Creo que lo que pasa es que todo lo que no nos deja algo "productivo" resulta mas difícil, sentir que lo que hacemos no va para ningún lado en el sentido monetario o de prestigio. Igual pienso que muchas cosas buenas que se hacen se hicieron sin intención productiva o de fama...

Pájaro Verde dijo...

A todos nos pasa supongo... quizás la creación inconclusa deja con la bala pasá, pero estresa menos, jejje